5 de octubre de 2015.
Sr. Zeid Ra’ad Al Hussein
Alto Comisionado de las Naciones
Unidas para los Derechos Humanos
PRESENTE
Desde la organización civil feminista, Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad Oaxaca A.C., por medio de la presente, nos dirigimos a Usted con el fin de hacerle llegar información, respecto a la situación de los derechos humanos en el estado de Oaxaca, la que ilustra la crisis permanente de derechos humanos que se está viviendo en todo el país.
Es para nosotras de particular importancia informar sobre la situación del estado de Oaxaca puesto que si bien se viven tendencias muy parecidas a las del país en general, la situación específica de nuestro estado merece una atención particular. En este sentido es importante recordar que Oaxaca es considerado uno de los estados más pobres del país donde se concentra la mayor diversidad étnica y lingüística al contar con 18 grupos étnicos de los 65 con los que se cuenta a nivel nacional. Las comunidades indígenas son las que presentan los índices de marginación más altos y donde el mayor número de violaciones a derechos humanos ha sido documentado.[1]
Desde el 2010 y después de 80 años de gobiernos priistas, se vive en Oaxaca un proceso de alternancia política, el que trajo consigo la aprobación de diversas reformas y la creación de instancias con enfoque de Derechos Humanos. Sin embargo, dichos cambios no han impactado de manera tangible en la situación de los derechos humanos en la entidad, a lo contrario, las violaciones a derechos humanos van en aumento constante y la impunidad por los crímenes del 2006, asesinatos de defensoras y defensoras de derechos humanos y otras violaciones a derechos humanos permanece total. La lógica empresarial enmarcada en la implementación de las reformas estructurales nacionales constituyen las líneas directrices de la acción de Estado.
El recién simulacro de consulta de los Pueblos Indígenas para aprobar la construcción de parques eólicos en Juchitán, la criminalización de las personas defensoras que resisten contra las empresas mineras en Magdalena Teitipac y la represión contra la sociedad organizada en defensa del Cerro del Fortín[2] en la ciudad de Oaxaca, son algunos ejemplos de dicha lógica donde el control del territorio y la apropiación de los recursos naturales de los pueblos es lo que marca la acción.
Asimismo el clima de represión que se ha hecho más tangible a partir de las elecciones de junio 2015 es de particular gravedad, debido al arribo desmesurado de fuerzas armadas: policía federal, gendarmería y ejercito a la ciudad de Oaxaca. De ahí que expresamos nuestra profunda preocupación por este despliegue de fuerzas, pues como ha sido documentado en años anteriores a nivel nacional, este tipo de estrategia, lejos de contribuir a la seguridad de la población, implica un aumento en la comisión de delitos y de la violencia en general. En Oaxaca, este tipo de acciones busca inhibir la movilización magisterial frente a los impactos de la reforma educativa. Por otro lado se genera un clima de incertidumbre, persecución y la criminalización del movimiento magisterial y de la protesta social en general.
Enumeremos finalmente algunas cifras ilustrativas de este contexto: en lo que va del sexenio de Gabino Cué, organizaciones de la sociedad civil hemos registrado en el estado de Oaxaca: 61 personas en situación de prisión política, 347 ataques contra mujeres defensoras de DH, 1 agresión cada 3 días contra defensoras/es comunitarias/os, 406 feminicidios y en tan solo el primer trienio: 78 ejecuciones de líderes sociales, personas defensoras de derechos humanos y otros asesinatos por motivos políticos.
Frente a esta situación, su presencia en el país a efecto de conocer la realidad, en este momento es de particular relevancia. Expresamos ante Usted nuestra preocupación para quienes hacemos defensa de los derechos humanos y le solicitamos a Usted así como a la oficina en México que presten particular atención a la vulnerabilidad en la que se encuentra la población del estado de Oaxaca, sobre todo quienes se dedican a la defensa de los derechos humanos y denuncian las violaciones a los mismos; así como a los impactos de la violencia política en mujeres niñas y niños y la situación de personas presas por motivos políticos.
Sin más por el momento, agradecemos de antemano su atención.
ATENTAMENTE
Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad Oaxaca A.C.
[1] Informe Ciudadano: Una deuda pendiente, Los Derechos Humanos en Oaxaca 2009-2012, 2013, Disponible en : http://consorciooaxaca.org.mx/wp-content/uploads/2013/08/INFORME_CIUDADANO_FINAL%20Deuda%20pendiente.pdf
[2] Caso del proyecto del Centro Cultural y de Convenciones de la Ciudad de Oaxaca (CCCO): Francisco Toledo miembro de la organización civil Proax, misma que encabeza la lucha por conservar el patrimonio cultural y ecológico de la ciudad de Oaxaca, fue golpeado por trabajadores de dicha obra durante el mes de junio cuando con un grupo de vecinos afectados por las construcciòn de dicho complejo turistico se presentaron al lugar para tratar de dialogar con los miembros de la CTM que talaban los àrboles para iniciar la obra, misma que no fue consultada e implica un negocio del actual secretario de Turismo.