Los restos de Bertha Elena Muñoz Mier, conocida como la doctora Escopeta en el gobierno del priísta Ulises Ruiz Ortiz durante el conflicto magisterial de 2006, fueron velados en una funeraria del centro histórico de esta ciudad y posteriormente cremados.
Antes, familiares, amigos e integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) le rindieron un homenaje, del que días antes había dicho, no lo quería.
¡Hombro con hombro, codo con codo, la APPO, la APPO, la APPO somos todos!
, ¡Ojo por ojo, diente por diente, Ulises asesino, la cuenta esta pendiente!
, fueron las consignas que se volvieron a escuchar durante la despedida de Muñoz Mier.
También hubo sones y poesías de parte de amigos y seguidores de la maestra exiliada durante dos años en la ciudad de México y Bolivia, quienes rindieron tributo a quien fuera la voz del movimiento social mediante los micrófonos de Radio Universidad.
No quiero homenajes, yo no soy una heroína; los homenajes deben ser para los caídos, para los desaparecidos, los presos, los huérfanos, ellos son los héroes
, dijo la doctora días antes de fallecer, recordó su hijo Víctor Muñoz.
Michoacana de nacimiento, llegó a Oaxaca para ejercer la medicina y poco a poco se enamoró de esta entidad. Su hijo Víctor recordó la labor de la doctora Bertha durante el conflicto social de 2006, en el que inició como concejal de la APPO.
La organización se deslindó de ella después, debido a traiciones en el interior del movimiento, y hubo líderes que obtuvieron beneficios personales. Pero ella se mantuvo firme en Radio Universidad y controlaba las casi 3 mil barricadas en los alrededores de la ciudad de Oaxaca. A todos los traía cortititos. En la banda punk y anarquista nunca le hicimos caso a la APPO, pero mi madre decía algo y todos derechitos y paraditos nos cuadrábamos
.
Víctor recordó el momento en que la Policía Federal ingresó a suelo universitario para recuperar
las instalaciones. Los de la asamblea se escondieron, y quien salió a rescatarla fue la banda punk, los vecinos de la colonia, los jóvenes que andaban en el cotorreo, ellos se fueron con ella a Bolivia y la cuidaron en el DF, cuando andaban los puercos empistolados buscándola”.
Fernando Guadarrama y el grupo Tapacamino interpretaron El son de la barricada frente al féretro, canción dedicada a la revuelta social, y Las poblanas: Bertha me dijo otro bando quiero verlos con risa, no quiero verlos llorando
, y finalmente La morena, tras lo cual se volvieron a escuchar las consignas que cimbraron las calles de Oaxaca en 2006.
Bertha Elena Muñoz, fallecida el viernes por una insuficiencia respiratoria, fue cremada ayer al término de una misa de cuerpo presente en la iglesia de San Felipe Neri. Sus cenizas serán esparcidas en las comunidades donde trabajó.